Hoy en horas de la mañana, el presidente del directorio de la Sociedad de Beneficencia de Jaén, Dr. Hugo Cieza Delgado, realizó una visita solidaria al domicilio del señor Zebelio Kayap Jempekit, un docente de origen Awajún de 48 años que lleva más de un año postrado en cama debido a un grave deterioro de su salud a causa de la diabetes tipo 2. El titular de la SBJ estuvo acompañado del personal asistencial de la Gerencia de Programas de Protección Social de la institución, así como de la Lic. Carmelina González Pérez, presidenta del Comité de Damas en apoyo a la Municipalidad Provincial de Jaén.
El caso de don Zebelio, quien hasta antes de su enfermedad laboraba como docente en la Escuela Superior Víctor Andrés Belaúnde (ex pedagógico de Jaén), ha conmovido a las autoridades locales. Su enfermedad lo obligó a dejar de trabajar y permanecer en la ciudad, lejos de su tierra natal en la selva, sin familia que lo acompañe y dependiendo únicamente del apoyo de vecinos y algunos colegas solidarios.
Ante esta situación, la Sociedad de Beneficencia de Jaén ha asumido el compromiso de brindarle alimentación diaria —desayuno, almuerzo y cena— en su domicilio, con dietas diseñadas según las indicaciones del nutricionista del programa de protección social. Esta medida busca aliviar la difícil situación del docente y contribuir a su recuperación.
Durante la visita, la licenciada Carmelina González Pérez reafirmó el compromiso del Comité de Damas y de la Municipalidad Provincial de Jaén con los casos sociales urgentes. Indicó que, además, desde su función como responsable de la zona sanitaria de los Sauces, coordinará el monitoreo de salud del docente en su propia vivienda. “Nuestro compromiso lo asumimos de manera inmediata, teniendo en cuenta la necesidad por la que pasa don Zebelio, una persona Awajún que se encuentra solo y sin el apoyo probablemente de sus familiares. Para eso estamos las instituciones”, declaró.

Por su parte, el profesor Zebelio expresó su agradecimiento público por el apoyo recibido. “Cuando me dijeron que pidamos apoyo públicamente, no pensé que iba a ser tan rápido. Estoy muy agradecido de corazón que se hayan comprometido con mi alimentación y mi salud. Espero recuperarme. Yo aún estoy intentando trabajar. Hago el esfuerzo para levantarme y poder coger mi computadora y hacer algunos trabajos virtuales”, comentó visiblemente emocionado.
La Sociedad de Beneficencia de Jaén ha señalado que continuará brindando el acompañamiento necesario a este caso, con un enfoque solidario e inclusivo que caracteriza su actual gestión. La historia de don Zebelio pone en evidencia la importancia del trabajo articulado entre instituciones para brindar asistencia a quienes más lo necesitan.
Fuente: Beneficencia Jaén